Helado casero bajo en calorías

No dejo de ver anuncios en la tele sobre anticelulíticos, complementos para adelgazar, plan Special K y todo lo relacionado con la operación bikini, es como una bomba de tiempo!. Seguidamente un anuncio de helados a base de yogur y todos los complementos que puedas añadirle (toppings).

A casi todos nos gustan los helados, los hay de todos los sabores y combinaciones. A mi los helados me encantan, vaya!, pero claro, analizamos el contenido nutricional y nos encontramos con lo siguiente por un helado básico normal (los de bola de toda la vida):

Teniendo en cuenta que una terrina pequeñitamás  contiene más de 100 ml estamos consumiendo muchas calorías donde casi todas vienen de azúcares simples y grasas saturadas que la verdad pues... también tendríamos que ir con cuidado.

Nos vamos a privar de por vida de los helados cuando hace un tiempo genial? No, no, no. Siempre pienso que hay otras opciones y soluciones para todo. Por qué no disfrutamos mientras nos cuidamos y nos comemos un helado sin remordimientos?. Si los helados de yogur se han puesto de moda aquí va una receta con yogur que más de un veranillo la he preparado en casa y siempre ha triunfado:

Helado casero: Dolce e Freddo

5 yogures naturales desnatados

3 yogures de fresa desnatados

300 gr de fresas

Stevia líquida al gusto (yo prefiero dulce dulce)

Una vaina de vainilla

unos 100 ml de leche desnatada

• En un bol grande ponemos los yogures tanto naturales como de fresa, los mezclamos bien para que se pongan cremosos y añadimos la Stevia que creamos necesaria para endulzar. Yo he optado por unos ecológicos que produce mi amiga Eli, noto mucho más el sabor y la textura cremosa.

• Cortamos las fresas en trocitos muy pequeños y las añadimos a la mezcla. Para obtener más color podéis chafar unas cuantas fresas y su propio jugo aportarán un color rojo muy intenso. 

• Cortamos la vaina de vainilla por la mitad, a lo largo y raspamos las semillas sobre la leche desnatada en una cacerola pequeñita hasta que entre en hervor. Dejamos enfriar, unimos a los yogures, removemos y al congelador.

• Ahora viene la parte algo pesada pero importante para la cremosidad del helado. Cada hora aproximadamente vamos sacando del congelador y batimos bien para que no se cristalice, hacemos esto hasta que ya esté helado y tenga la consistencia cremosa.

• Si queréis se pueden añadir otros ingredientes al gusto como avellanas, nueces u otras frutas de temporada picadas muy pequeñito.

 

Si más bien os da pereza hacerlo en casa, siempre hay helados sin azúcar en el super o en las mismas heladerías, pero ya os digo que el nivel de grasas saturadas sigue siendo alto además de seguir consumiendo conservantes y colorantes. Haciéndolo en casa de esta manera o maneras parecidas, el contenido calórico es realmente bajo en comparación a los helados industriales. Con esto tenemos un buen aporte de proteínas sin grasas saturadas además de la libertad de darle el gusto y combinaciones que queramos. Esta es una forma más sana y natural de darnos un capricho. Recuperemos lo auténtico...qué tal luego un paseo en bici?. Buena semana a todos!