Crêpes ligeras rellenas de dulce de leche
Para la masa:
Medio vaso de harina integral
1 vaso de leche desnatada
1 huevo fresco
1 pizca de sal
1 pizca de canela
Para el dulce:
1 litro de leche desnatada
medio vasito de leche en polvo desnatada
Stevia líquida al gusto
2 cucharaditas de bicarbonato sódico
1 ramita de vainilla
5 cucharadas colmadas de Maizena
- Primero dejamos la masa de las crêpes preparada. En un bol mediano ponemos toda la harina y echamos el huevo encima, mezclamos bien para que no quede ningún grumo.
- Agregamos la leche y acabamos de formar una masa totalmente uniforme, agregando la canela y la sal.
- Teniendo ya la masa preparamos una sartén con un poco de margarina y
hacemos las crêpes hasta que lleguen a un ligero dorado. Separamos en el plato a servir. - En un bol mezclamos la leche líquida con la leche en polvo, la vainilla y el bicarbonato hasta
diluir bien. - Vertemos la mezcla en una olla grande y ponemos a fuego alto media hora, luego a fuego lento removiendo sin parar durante una hora (la parte de antaño).
- Pasada la hora diluímos la Maizena con un poco más de leche líquida y la añadimos.
- Finalmente cuando ya haya quedado todo con el espesor deseado añadimos la Stevia y movemos bien para que todo el dulce coja el dulzor.
- Rellenamos las crêpes con el dulce de leche y voilà!
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| Lo que hace la primavera con las fotos! |
El bicarbonato se usa para darle color. A mi con dos cucharaditas me ha quedado oscurillo, así que a vuestro gusto podéis añadir una menos. Para la presentación final podéis añadir unos frutos secos o un poco de coco rayado, a mi se me ha ido pero queda de maravilla.
El dulce de leche, como muchos sabréis, puede combinar con muchísimas cosas! Tostadas, fruta, galletas, pan recién hecho, tartas, yogur... Así que si queréis probar una opción distinta y mucho más sana ya os he ayudado un poquito.
Ahora muchos se preguntarán....pero qué tanta manía con el azúcar si toda la vida la hemos consumido?! Y también cada vez se consumen más cantidades bestiales en poco volumen de alimento como los dulces industriales que de un bocado ya ha desaparecido, y con él una carga glucémica de miedo en el torrente sanguíneo. Se añade hasta en productos impensables como verdura en conserva y diversas salsas saladas, hasta en la salsa de soja con lo salada que es, está añadida a casi todo. El incremento del azúcar en la alimentación es proporcional a muchísimas enfermedades de este siglo relacionadas al síndrome metabólico. Llevo meses queriendo hacer un especial de todo lo que significa el consumo de azúcar. Pero viendo nuevos estudios científicos y noticias que cada vez relacionan más el consumo de azúcar a las enfermedades crónicas (que combatimos día a día) siento que me quedo corta y que nunca acabaría... de momento hasta coger fuerzas para hacer un especial os dejo 3 artículos que considero interesantes para tomar en cuenta en vuestra alimentación diaria:
Y así amigos míos, podría continuar horas y horas si me meto más en este mundillo oscuro del exceso de azúcar en la alimentación mundial, y encima le podemos sumar el interés de la industria alimentaria para que esto siga así sin pensar a lo que nos está llevando. Vayamos mucho más allá y veamos otras opciones dulces que se adapten mejor a nuestro organismo y estilo de vida. Los estudios y las estadísticas no mienten, empezar a cuidarnos ahora nos ahorrará grandes problemas en el futuro. Poned cabeza al placer de comer.
Os dejo una idea que sacamos para una presentación dirigida a niños de 6 a 7 años. Hay mil formas de empezar a formar una buena base de educación alimentaría si le ponemos creatividad y una chispilla de encanto.
A cuidarse mucho, divertiros y acabad de pasar un domingo genial!!!
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